Los entrenadores quieren encontrar, en ocasiones, soluciones rápidas para la motivación de sus jugadores. Psicólogos y coach, caen a veces en la misma trampa. Buscan el ejercicio mágico o el vídeo motivacional que provoque un “clic” en la cabeza de quienes lideran y que haga que todo cambie. Este artículo va a tener un tono pesimista de inicio porque, siento mucho deciros que la motivación de otros ni surge con un chasquido de dedos ni depende cien por cien de vosotros.
...
Para leer este contenido tienes que suscribirte.